domingo, 21 de septiembre de 2008

HIPÉRBATON / Las palabras desordenadas

ETIMOLOGÍA

Dejadme que os hable del hipérbaton, una palabra que al empezar por hiper- ya podemos intuir que tiene un primer origen griego. Y de ese origen es de donde trajo consigo su significado, que es “transposición”.

DEFINICIÓN Y EJEMPLOS

Lo que transpone el hipérbaton, lo que descoloca, es el orden habitual que seguimos para expresarnos. Para verlo mejor partamos de la estructura de una frase tipo en la que el sujeto preceda al predicado. Este sería el caso si yo digo “El intérprete te ocultó algo”. El hipérbaton vendría si me salto la regla general y empiezo por el predicado, tal que así: “Te ocultó algo el intérprete” (daros cuenta de que además en este caso el hipérbaton nos serviría para separar dos sílabas “te” y así evitar el posible efecto malsonante que pueden provocar al estar seguidas). Pero aún cabría otro hipérbaton después, si dejo al verbo detrás de su complemento. El hipérbaton resultante sería “Algo te ocultó el intérprete”, que coloca al principio ese “algo”, avisando de su importancia. Una intención esta última, la de enfatizar, muy común en el hipérbaton.

Otra motivación a la hora de construir un hipérbaton fue en su tiempo la de latinizar el lenguaje; Recordemos que en latín el verbo se sitúa al final de la oración.

En definitiva, el hipérbaton, lo que trata es de probar las vueltas que tiene una frase o un discurso. Eso sí, sin que los giros lleguen a ser tan rebuscados que dificulten la comprensión. Un hipérbaton incorrecto, por ejemplo, se daría si incluyéramos en el corta y pega a preposiciones, artículos y conjunciones sin mantenerlos junto a los términos a los que afectan directamente.

USO

La cuestión es que el hipérbaton está muy presente en el día a día. Lo escuchamos, por poner un ejemplo, en las películas; cuando intentan emocionarnos con frases de corte épico como “Que la fuerza te acompañe” (en vez de "Que te acompañe la fuerza") o como “Largo es el camino”.

USO LITERARIO Y EJEMPLOS

Algo parecido es lo que se busca con el hipérbaton en la literatura, ya que los escritores huyen de las expresiones convencionales, que ya no nos sorprenden, y recurren a otras más originales para que no pasemos por alto las ideas que contienen.

El hipérbaton también se elige para dar al texto una secuencia de sonidos determinada. Esto se ve muy bien en la poesía, sobre todo en aquellos poemas donde la métrica manda. Por ejemplo, Garcilaso de la Vega, en el verso “de verdes sauces hay una espesura” sitúa el acento de “hay” en una sílaba par, gracias al uso del hipérbaton.

Y no dejamos a Garcilaso, puesto que vuelve a emplear el hipérbaton y esta vez para destacar algo muy propio de la poesía española renacentista (de la cual él es el máximo exponente); Lo que hace es utilizar el hipérbaton para encabezar un verso con un referente mitológico, fijaros: “A Dafne ya los brazos le crecían”.

IN MEDIA RES

Y vamos con una especie de hipérbaton, pero entendido como técnica narrativa; Es el llamado in media res, que quiere decir “en mitad del asunto”, y se caracteriza por contar el inicio de una historia precisamente por ahí, es decir, con la trama ya desencadenada. O sea que sigue un orden inverso, hasta finalmente saltar al desenlace de la historia. Todo un tipo de hipérbaton, ¿no creéis? Es típico de la novela policíaca.

PARTICIPACIÓN

Para el hipérbaton que os voy a proponer ahora vais a necesitar un periódico y unas tijeras. Sí, se trata de que recortéis las palabras de una frase larga, de redacción formal, y de que las intercambiéis de posición. Aunque eso sí, sin que se pierda el sentido de la frase. A ver qué sale y cómo suena. Es muy probable que el resultado se aproxime mucho al lenguaje literario e incluso al poético. Estaría fenomenal que comparáramos aquí el antes y el después de esas frases.

No hay comentarios: