miércoles, 27 de agosto de 2008

PARADOJA / La lógica de la contradicción

ETIMOLOGÍA

Si buscáramos un sinónimo de paradoja ese sería contradicción. Y el tipo de contradicción de que se trata nos lo dice el origen de la palabra paradoja, su etimología: para y doxa son dos términos griegos que significan “contrario a” y “opinión” respectivamente.

DEFINICIÓN

Así que una paradoja consiste en cuestionar una opinión comúnmente aceptada. Eso sí, tendrá siempre que estar argumentada de forma lógica. Ya en el siglo V a. C., el filósofo griego Zenón de Elea formuló paradojas tan populares como la de Aquiles y la tortuga. Aquella en que la tortuga al partir con una ventaja nunca podía ser alcanzada por Aquiles, porque a cada distancia que le recortaba Aquiles ella siempre avanzaba un tramo más. Es sin duda un absurdo, pero argumentaciones como esta han provocado posteriores avances en diversas áreas del conocimiento. A la paradoja no le frena el sentido común y te pone en la posición de tener que demostrar, pongamos por caso, incluso que el cielo es azul.

EJEMPLO

Algo muy parecido a lo que planteó el siguiente ejemplo, la llamada paradoja de Olbers. ¿Por qué de noche el cielo es oscuro? El astrónomo Heinrich Olbers sostenía que como el Universo es ilimitado, su número de estrellas también, y por tanto todo el cielo nocturno debería estar completamente cubierto de estrellas. Pues bien, la solución llegó más de un siglo después y fue una de las grandes evidencias de la existencia de un Big Bang. Venía a decir que lo que no es infinito es la edad del Universo, motivo por el que hay luces de estrellas que todavía no han alcanzado nuestro planeta.

USO

El uso de la paradoja no se limita al ámbito de la Ciencia, sino que también se emplea en el Arte. Recordemos al artista gráfico Escher y sus escaleras imposibles, que por más que se suben o se bajan llevan siempre al mismo sitio. Toda una paradoja.

USO LITERARIO

Literariamente, la paradoja tiene un significado algo diferente. La utilizada por los escritores lo que refleja habitualmente es la propia contradicción humana. Es un recurso que nos hace ver que nada es ni blanco ni negro sino todo lo contrario, y que abandona la forma lógica en favor de una forma contradictoria.

EJEMPLOS LITERARIOS

Vamos a verlo más claro con algún ejemplo; San Agustín escribió la paradoja “No me buscarías si no me hubieras encontrado”, que es sólo una muestra de lo mucho que abunda la paradoja en la literatura mística; caracterizada por el amor a Dios, pero también por el dolor que se sufre hasta alcanzar la unión con Él. Una expresión de esto son los célebres versos de Santa Teresa de Jesús “Vivo sin vivir en mí,/ y de tal manera espero,/ que muero porque no muero”; En sólo tres versos, dos paradojas.

Otra posibilidad es que toda la narración sea una paradoja. Tomemos como referencia en este caso la obra del polémico escritor inglés Chesterton, que manejaba la paradoja, por ejemplo, para atacar el prohibicionismo del gobierno británico; En su novela “La taberna errante” la paradoja es que presenta un sitio de los ciudadanos que ya no tienen sitio.

PARTICIPACIÓN

Por último, la propuesta de participación es una paradoja literaria, claro. Del tipo “La brevedad de los siete tomos de En busca del tiempo perdido es la propia de los instantes de tiempo atrapado”. Contadnos vuestras contradicciones, vuestras paradojas quiero decir.

No hay comentarios: